Por : Humberto Perdomo, Estudiante de Ciencia Política de la Usco
Eran las 7:00am y en el costado Norte del Estadio Guillermo Plazas Alcid de la ciudad de Neiva, había más de 2000 jóvenes, es el esperado viernes 20 de septiembre y llegaron puntuales a la cita, pues si algo tienen claro es que son el presente y no solo el futuro de esta sociedad. Son conscientes de que el Cambio Climático amenaza la vida en el planeta y no van a faltar ni de broma a la huelga mundial contra el cambio climático promovida por Greta Thunberg, una joven sueca de 16 años.
Desde hace varias semanas atrás se habló en Neiva de organizar la marcha contra el cambio climático, la Red de Personeros del Municipio se reunió con el propósito de abanderar la propuesta. No querían marchar al Parque Santander, según lo aconstumbrado. “¿Para qué?”, se preguntaron. “Es necesario reconocer el territorio y las zonas más afectadas del municipio”, concluyeron, y en seguida hicieron la propuesta de que la movilización debía dirigirse al humedal El Chaparro.
El Humedal El Chaparro es un importante ecosistema del municipio de Neiva, en riesgo de desaparecer. Las memorias de los habitantes narran historias alrededor del humedal desde la mitad del siglo XX, alimentado por la quebrada la Barrialosa y El Chaparro. En el año 2009 se secó por primera vez, un triste acontecimiento recordado por los habitantes de los barrios aledaños. Posteriormente se generaron otras alteraciones que han puesto en amenaza constante el humedal, como los recientes procesos de urbanización que se han adelantado con el aval del Plan de Ordenamiento Territorial vigente, el cual no hace un reconocimiento de la categoría de Humedal para esta zona, mientras reconoce los cuerpos de agua dentro de su sistema hídrico y les asigna áreas de protección que no son suficientes, pues incluso se han realizado sellamientos donde se originaban las micro-cuencas.
Por esta compleja situación, no solamente de este humedal sino de otros sitios en la ciudad como el Parque Isla y el Jardín Botánico, se propuso que la marcha fuera a visibilizar esta problemática en una zona importante para el municipio. También, para promover la preservación de un ecosistema al que llegan aves migratorias de Norte América y Canadá y que contribuye a la conservación de la biodiversidad, la regulación hidrológica y el desarrollo sostenible de la región.
Casi eran las diez de la mañana cuando al humedal empezó a llegar la marcha que fue recibida en calle de honor por los alumnos del colegio Enrique Olaya Herrera. La zona de humedal de alrededor de 20 hectáreas estuvo parcialmente ocupada por los manifestantes, quienes hicieron un llamado al alcalde de Neiva y a las autoridades competentes para que se empiece a gestionar el Parque de Ciudad sobre este humedal y se detengan las construcciones que en la actualidad se están desarrollando.
Cada institución educativa ofreció un saludo a través de un(a) vocero(a) estudiante que se dirigía a la multitud para reiterar el compromiso individual y como institución con las acciones que mitiguen los efectos del cambio climático, así como para solicitar al Alcalde Rodrigo Lara que desde su administración gestione el Parque de Ciudad en el Humedal. Así mismo, a cada uno de los rectores de las instituciones educativas que estuvieron presentes se les otorgó una medalla por parte de la Fundación El Curibano como reconocimiento del compromiso con la Huelga Mundial contra el Cambio Climático.